Primero de todo: no, no te he dado de baja. Aclarado este punto, esto es lo que puede estar pasando:

Spam o promociones

Comprueba las bandejas/carpetas de «spam» o «correo no deseado», «promociones» y similares y, si me encuentras ahí, sácame.

Para evitar que vuelva a pasar, agrégame a la agenda de contactos de tu gestor de correo.

Direcciones corporativas

Si utilizas una dirección de email corporativa, tu empresa filtra parte de los correos que llegan desde fuera de la organización, incluidos los míos.

Puedes comentárselo al departamento de informática, pero lo más probable es que lo nieguen porque no tengan ganas de solucionarlo. En este caso suscríbete con una dirección de correo personal.

Proveedores de correo poco aconsejables

Apple (usar la app de correo de apple, o direcciones @me.com o @icloud.com, por ejemplo) y hotmail o hey.com (aunque sobre todo Apple), son algunos de los proveedores de correo a los que les gusta decidir por sus usuarios qué deberían ver y qué no, y a veces deciden no entregarte un mensaje. Nada que yo pueda hacer, aunque para reducir el riesgo de que vuelva a pasar, agrégame a la agenda de contactos de tu gestor de correo.

Si quieres estar seguro de que te llega todo lo que te envían, pásate a gmail.com.

Te has dado de baja

Si ninguno de los casos anteriores soluciona tu problema, es casi seguro que te has dado de baja –quizás por error–, no estés dado de alta o lo estés con otra dirección de correo.

Ve a deporras.com y date de alta con la dirección de correo deseada.

Nunca llegaste a apuntarte

Como lo lees. Al menos con esa dirección. Es decir, que estás comprobando la bandeja de entrada correspondiente a una dirección de correo electrónico diferente a la que usaste para apuntarte.